Washington, D.C.- El presidente argentino Javier Milei, convertido en un icono de la derecha mundial, encontró en la gala hispana de Washington un escenario ideal para reforzar su visión política. Invitado especial de Donald Trump, quien asumirá nuevamente la presidencia de Estados Unidos el próximo lunes 20 de enero, Milei no solo recibió un cálido reconocimiento con el premio “Titán de la Reforma Económica”, sino que también aprovechó para exponer su agenda de reducción del Estado, lucha contra el “socialismo” y confrontación directa contra las ideologías progresistas.
“El socialismo es una enfermedad del hombre”, afirmó Milei entre aplausos, dejando claro que su retórica combativa sigue siendo su mayor fortaleza entre audiencias conservadoras. Su mensaje de achicar el Estado, desregular la economía y defender los derechos de propiedad resuena fuertemente en un sector de la comunidad hispana que ve en su figura un modelo a seguir para replicar en el hemisferio norte.
El evento también sirvió para subrayar la sintonía entre los planes de ambos gobiernos. Trump, quien ha designado a figuras como Vivek Ramaswamy y Elon Musk para liderar iniciativas de desregulación en Estados Unidos, encuentra en Milei un aliado que ya está implementando medidas similares en Argentina. La presencia de figuras clave como Marco Rubio y Ted Cruz en la gala refuerza el peso político de esta alianza.
Milei presumió de logros económicos, como el superávit fiscal y su estrategia de recortar el gasto público con una “motosierra”, reafirmando su postura de no “consensuar con el enemigo”. Esta declaración deja entrever que su estilo de liderazgo no es negociador, sino frontal, lo que lo diferencia de otros políticos que buscan acuerdos.
Espero que Trump acabe con la basura woke
Poco antes de ese evento, a su llegada a Washington, el presidente argentino declaró que espera que el nuevo mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, sea un “líder” en la lucha contra la “basura woke (progresista)” en el mundo.
“Tengo grandes esperanzas de que sea el líder que todos esperamos, luchando contra la basura ‘woke’ que está contaminando al mundo”, afirmó.
“Es excelente la relación con Estados Unidos y esperamos que cada día sea muchísimo mejor todavía”, agregó el mandatario argentino.
Este término, que hace referencia a ideologías progresistas en torno a la presunta justicia social y la diversidad, es señalado por Milei como una de las grandes amenazas contemporáneas. La declaración del mandatario argentino sobre su esperanza de que Trump lidere esta cruzada es un claro llamado a la unidad en una causa compartida.
Mientras Milei se prepara para asistir al Foro Económico Mundial en Davos tras la investidura de Trump, el mensaje que deja es claro: su agenda no solo es local, sino global. La colaboración entre ambos líderes podría marcar un punto de inflexión en la política internacional, fortaleciendo un movimiento conservador que trasciende fronteras.
Con información de X.
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