México, ¿país de ingenuos?

Primer acto: El Presidente Felipe Calderón ignoraba los malos pasos en los que andaba su Secretario de Seguridad Pública .

Segundo acto: El Gobernador Adán Augusto ignoraba los malos pasos en los que andaba su Secretario de Seguridad Pública.

Tercer acto: El Secretario de Marina Rafael Ojeda Duran ignoraba los malos pasos en los que andaban sus sobrinos más que políticos.

¿Cómo se llamó la obra? “La ingenuidad es contagiosa”.

¿Acaso una pensión universal logra un país ingenuo? ¿En serio hay ingenuos que creen que los jefes políticos no saben de las corruptelas de sus subordinados? ¿En serio la Presidenta Claudia Sheinbaum tendrá el ánimo de cargar culpas ajenas? ¿En serio es un combate a la corrupción y a la impunidad por iniciativa presidencial más que por presiones de Estados Unidos? ¿En serio aún se cree el eslogan: “No mentir, No robar y no traicionar al pueblo”?

Ahora que sale a la Luz de la opinión pública “La barredora” y el doble robo al Estado mexicano: Robo de combustible y el huachicol fiscal, ¿a quien culpar? ¿A los neoliberales, a la oposición, a Calderón, a la prensa crítica? ¿Quién sí mintió, sí robo y sí traicionó al pueblo? Por el bien de todos que cada quien asuma los costos y sus responsabilidades y el esfuerzo presidencial – forzado o no – de limpiar la casa mal barrida sea una muestra clara que la transformación tantas veces presumida es más que una frase de campaña.

En aras de librarse de la “La Barredora” el hoy líder de los senadores de Morena dice que en su momento el mismo pidió que se investigara a su colaborador, en aras de librar al Secretario de Marina el Titular de la FGR dice que el secretario pidió que se investigaran acciones que dañaban al Estado, mientras quien fue jefe del ex secretario de gobernación y del ex secretario de Marina escribe un libro sin preocupación alguna, sin embargo, la realidad es que la cabeza de Genaro García Luna se exhibía de manera cotidiana en toda conferencia y en todo discurso para que el pueblo bueno no olvidara la corrupción de ayer mientras se gestaban actos de corrupción en varias dependencias de gobierno y la escoba…solo ocultaba la basura debajo de la alfombra color guinda.

Hoy la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo al dar el tradicional grito de Independencia – mas allá de las consignas a favor de nuestros héroes patrios – debe lanzar un grito de Esperanza al pueblo de México, un grito que es un grito silencioso qué millones de mexicanos lanzan todos los días: ¡Cero tolerancia a la impunidad! ¡El pacto entre pueblo y gobierno es mucho más patriótico que el pacto entre élites criminales! ¿La presidenta tendrá en sus arengas el México que respira en cada rincón del país o solo el que respira bajo las siglas de un partido político? ¿Acaso los presuntos traidores a la Patria solo están en la oposición?

Ayer unos encubrieron a un alto funcionario público del gobierno federal y tuvo que ser detenido, sometido a juicio y sentenciado por Estados Unidos, ¿acaso hoy  la historia se volverá a repetir? ¿Qué parte de “no somos iguales” se tambalea en el imaginario colectivo?

Cuándo en otro país se imparte justicia sobre hechos ocurridos en México y por mexicanos coludidos con el crimen organizado, ¿donde queda la Soberanía de la que tanto se habla? Que nadie se confunda, la presión de Estados Unidos sobre el gobierno de México para combatir el trafico de drogas y el huachicol en sus 2 vertientes está a la vista, la fuerza política de la presidenta está a prueba, algunos – incluso de su mismo partido político – han minimizado sus capacidades y su autoridad, ponen su mirada en un rancho sin pensar que pronto, muy pronto se encuentren escribiendo el nombre de ese rancho sentados en una banca.

Lo cierto es que la historia de corrupción oficial – sea del partido que sea – demuestra que a la hora de obtener beneficios políticos y económicos muchos se ponen el traje de ingenuos pero el pueblo los llama…simplemente corruptos.

Que nadie se confunda, la política no es corrupta, hay políticos corruptos, la Marina no es corrupta, hay marinos corruptos, las complicidades con el crimen organizado existían ayer y lamentablemente…existen hoy.

P.D.- Con el ánimo que quede claro: La elite política por conveniencia propia peca de “ingenua” pero el pueblo de México está tomando nota…Escribiré otro día.