El exsecretario de Economía y negociador del T-MEC, Ildefonso Guajardo, sugirió que México debería aplicar aranceles de represalia a Estados Unidos si el gobierno de Donald Trump impone nuevos impuestos a las exportaciones mexicanas a partir del 1 de febrero.
En entrevista radiofónica, Guajardo enfatizó que una respuesta comercial es necesaria para evitar que México pierda capacidad de negociación en futuras revisiones del T-MEC. “No tenemos otra opción, aunque sea dolorosa. Si no reaccionamos, nos quedamos sin herramientas para sentarnos a negociar con Trump”, señaló.
El exfuncionario explicó que, dentro del marco del tratado comercial, México puede justificar la imposición de aranceles como una medida de defensa ante una decisión unilateral de Washington. “No se trata de una guerra comercial, sino de responder a una agresión discrecional”, aclaró.
Guajardo también indicó que, si estuviera en el lugar de la presidenta Claudia Sheinbaum, ya tendría identificados los productos clave para una represalia efectiva, enfocándose en sectores sensibles para los republicanos, como la fructosa, la carne de cerdo y los quesos.
Aunque considera que los aranceles de Trump podrían no aplicarse de inmediato, advirtió que la amenaza persiste y que, en cualquier momento, el mandatario estadounidense podría imponer un 25% de gravámenes a los productos mexicanos para presionar una renegociación del tratado.
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