Huerta, papá y mamá

“Todo mundo tiene un Papá y una Mamá… pero yo soy Papá y Mamá”. Así era el discurso que en sus buenos tiempos como dirigente de Morena, daba Manuel Huerta Ladrón de Guevara a quienes aspiraban a ser candidatos. El mensaje era claro: Yo te voy a ayudar, te cobijaré, te protegeré… y tú acudirás a mí.
Sin duda, el Senador es un personaje. Lo mismo es con sentencias que con apodos. Dicen sus cercanos que le encanta poner motes. Por ejemplo, hay dos que le endilgó a la hoy Gobernadora: El primero, La Comadre. El segundo, hasta por pudor ni me atrevo a escribirlo… soy pesado, pero Manuel lo es más que la piedra de Sísifo.
No obstante, en Coatepec, una de las tantas bases que conformó como dirigente y super delegado de Bienestar, los mágicos pobladores no se amarraron la lengua para bautizarlo como el Rotoplas blanco (recuerden que igual tenían el otro rotoplas de color negro) así como el Doctor Simi. Aunque sin duda, el que más caló fue el que le puso un choleño: Lord Fentanilo!
Sea como sea, Rotoplas, Simi o Fentanilo, se pudiera decir que Manuel Huerta es de los pocos políticos arrulladores que quedan en la izquierda… duermen con su canto de sirena… te mecen con su labia… y como muestra, un botón: Raymundo Andrade, el actual alcalde de Coatepec.
Cuentan que para definir la candidatura a diputado local, había dos: Miguel Ángel Hernández Suárez y el mismo Raymundo Andrade. Ambos personajes, atendiendo el llamado de Huerta (Yo soy Papá y Mamá), estaban en ascuas, pero el segundo fue llamado por el entonces superpoderoso secretario de Gobierno, Eric Cisneros Burgos, quien para esas fechas ya iba extendiendo su poderío en el Pueblo Mágico, y le dijo a Raymundo: Tú vas a ser el bueno. Esa noche, a casa de Andrade, llegó Manuel Huerta y le dijo: “Me costó un huevo y la mitad del otro, pero serás candidato”…
Así es Lord Fentanilo… un político arrullador quien como pudo, colocó sus fichas en el distrito de Coatepec…
Allí está Adrián González Naveda… allí está Nacho Luna…
Una perla más de Lord Fentanilo y ese colmillo largo y retorcido que tiene: la indicación a sus Huertalovers es una clásica: “Niégame las veces que sean necesarias… y si es prudente, despotrica de mí”. ¿Para qué? Sencillo, la indicación al hablar mal de él, llevará a que el interlocutor hable de más y el huertista tenga información fresca de cuál es la percepción que se tiene de su Gurú Político.
Por eso, si hoy ven a Adrián González Naveda no despotricando contra Manuel Huerta, pero sí echando flores al Gobierno de Nahle, no se espante, es parte de la política colmillo del senador xalapeño…
Al que sí no se le ha visto ni echando pestes contra su ex jefe ni alabando a la Gobernadora, es a Nacho Luna, quien ha preferido medio replegarse, mantener distancia… como el no presentarse al informe del Senador como sí lo hizo González Naveda, pero sí pasar lista de presente en un foro por la Defensa del Agua, donde también asistió el diputado federal del PT…
Nacho Luna es reservado… pero muy respetuoso de Huerta Ladrón de Guevara, su jefe político, su mentor… su padre putativo… y es que siendo hijo del esfuerzo de un campesino y albañil –quien ante la ausencia de una madre, logró sacar avante a este hoy presidente municipal electo– las palabras de Manuel Huerta quizás hayan sacudido las fibras más profundas del niño interno de Nacho Luna: “Yo soy Papá y soy Mamá”…
Así que, si con Raymundo Andrade gobernó el Rotoplas negro, no nos extrañe que con Nacho Luna gobierne el Rotoplas blanco…
Habrá que ver si en el PT no manda Lord Fentanilo!