Washington, D.C. – Lo que comenzó como una alianza poderosa entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el multimillonario Elon Musk se convirtió este jueves en un enfrentamiento público que ha estremecido tanto la arena política como los mercados financieros. La disputa, que se desarrolló en tiempo real en las redes sociales X y Truth Social, marcó el fin del “bromance” entre dos de las figuras más influyentes del mundo, con consecuencias que podrían redefinir el panorama político y económico de Estados Unidos.
El desencadenante fue el proyecto de ley presupuestaria de Trump, apodado el “Big, Beautiful Bill”, que propone recortes fiscales masivos y mayor gasto en defensa y control migratorio. Elon Musk, quien hasta la semana pasada lideró el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), criticó duramente la iniciativa, calificándola de “abominación repugnante” por su impacto en el déficit federal, estimado en 2.4 billones de dólares adicionales en la próxima década. En una conferencia de prensa en la Casa Blanca junto al canciller alemán Friedrich Merz, Trump expresó su decepción con Musk, sugiriendo que el enojo del empresario se debía a la eliminación de créditos fiscales para vehículos eléctricos, un golpe directo a Tesla.
La respuesta de Musk no se hizo esperar. En X, el magnate desmintió a Trump, asegurando que nunca tuvo acceso al proyecto de ley y que este fue aprobado “en la oscuridad”. En un tono desafiante, Musk afirmó: “Sin mí, Trump habría perdido las elecciones”, recordando los más de 280 millones de dólares que aportó a la campaña del republicano. La escalada alcanzó un punto crítico cuando Musk, sin evidencia, vinculó a Trump con los archivos de Jeffrey Epstein, acusando que esa sería la razón por la cual no se han desclasificado. Trump contraatacó en Truth Social, amenazando con cancelar los contratos y subsidios gubernamentales de las empresas de Musk, una medida que podría afectar proyectos clave de SpaceX con la NASA.
El impacto económico fue inmediato. Las acciones de Tesla se desplomaron un 14.26%, borrando más de 152,000 millones de dólares de su valor de mercado, mientras que la fortuna personal de Musk sufrió una pérdida de 34,000 millones de dólares, según el Índice de Multimillonarios de Bloomberg. En X, la pelea generó una tormenta de memes y comentarios, con usuarios comparándola con un “reality show” y figuras como Kanye West intentando, sin éxito, mediar entre ambos.
El enfrentamiento plantea preguntas sobre el futuro de la relación entre Musk y el gobierno de Trump. Mientras el presidente moderó su tono al final del día, evitando responder directamente a las acusaciones de Epstein, Musk continuó su ofensiva en X, apoyando a republicanos disidentes y sugiriendo la creación de un nuevo partido político. Con SpaceX y Tesla en la mira de posibles represalias gubernamentales, y Musk dispuesto a financiar a opositores de Trump, esta ruptura promete tener repercusiones duraderas.
Historias similares
¿Se acabó el “amor”? Proyecto de ley fiscal de Trump causa tensión entre Musk y el presidente estadounidense
¡Que siempre sí! Tribunal de Apelaciones de EE. UU. restablece aranceles impuestos por Trump, echando pa’trás decisión de la Corte Federal
Ley de rebaja de impuestos de Trump es aprobada por la Cámara de Representantes