En estos tiempos de desdoro y caos, el ejercicio de la comunicación se está convirtiendo en una guerra sin cuartel entre buenos periodistas que buscan sobrevivir de los ataques infames que sufre el oficio como tal y seudo-reporteros que venden su trágica indignidad a políticos sin ética y sin moral, que no es lo mismo.
Redactores que mantienen la decencia de la profesión se esmeran en ofrecer cada día noticias ciertas, apegadas a la realidad huidiza en la que vivimos inmersos. Intentan comunicar lo verdadero y poner en su lugar las falsedades cada día más cínicas de los mercachifles que son capaces de escribir lo que sea, sin importar si afectan honras y patrimonios.
Ante el peligro de nuevas leyes que pretenden cercenar la libertad de expresión (ésa que conquistamos los mexicanos en los últimos 50 años a fuerza de sacrificios de vida y de vidas de buenos colegas) permanece campante un libertinaje de plumas -plumíferas, debería llamarles- que se atreven a inventar infundios, a torcer la realidad con el fin de servir a sus amos absurdos y torpes.
Para esos malsanos, la cosa es calumniar que algo queda y sueltan lo que sea, aunque no se sostenga de ninguna manera ante la lógica pura.
Veo el caso del rumor inventado y alimentado artificialmente de que el Presidente de la Junta de Coordinación Política, el profesor Esteban Bautista Hernández, ha estado pagando a ciertos medios y/o columnistas para que ataquen a la gobernadora Rocío Nahle García.
Nada más absurdo y torpe, como aquellos mismos.
Lo cierto es que el diputado de Morena por Cosoleacaque es exactamente el mejor aliado de doña Rocío, y no de ahora. Como líder camaral, ha hecho un trabajo impecable en apoyo del proyecto planteado por la administración de la ingeniera Nahle. Nadie como él ha puesto talento, esfuerzo y capacidad para sustentar las acciones y las previsiones del Gobierno que encabeza una mujer por primera vez en la caudalosa y rica historia de Veracruz.
Promover la falsísima idea de que Esteban Bautista actúa en contra de la titular del Ejecutivo, es querer pasar el camello por el ojo de una aguja.
Nadie tan cercano, nadie tan apoyador, nadie tan leal como el profe, bruñido en el crisol de la lucha social y del sacrificio por los semejantes marginados.
Decir que es el más comprometido en el proyecto de llevar a Veracruz por el camino del desarrollo y el bienestar, es enunciar una verdad de a kilo; una verdad que ninguna pluma mal comprada y peor vendida puede tocar con la hiel de su amargura, con la intolerancia de su estolidez.
Es que son torpes, como ha dicho la exrectora Sara.
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