CDMX.- El Clásico Joven, anunciado como uno de los encuentros más esperados de la Liguilla, se convirtió en una decepción para los aficionados que esperaban intensidad y espectáculo. América y Cruz Azul no lograron romper el empate sin goles en el partido de ida de las Semifinales del Apertura 2024, celebrado en el Estadio Ciudad de los Deportes.
Desde el inicio, el partido careció de la chispa característica de un duelo de esta magnitud. Cruz Azul, líder en la fase regular, apostó por mantener el control defensivo, mientras que América, en busca de un tricampeonato, no mostró la contundencia ofensiva esperada. Aunque ambos equipos intentaron generar ocasiones, el encuentro estuvo marcado por un ritmo lento y predecible que desanimó a los asistentes.
Las pocas emociones que hubo se limitaron a un par de acercamientos tímidos. Luis Romo tuvo una oportunidad para Cruz Azul al inicio, pero la defensa americanista resolvió sin mayores problemas. Por su parte, América intentó aprovechar contragolpes y balones parados, pero nunca inquietó realmente al portero rival.
El segundo tiempo apenas presentó cambios. A pesar de los ajustes tácticos y las sustituciones, las escuadras continuaron sin ideas claras en el ataque. Luis Malagón, arquero de América, realizó un par de intervenciones destacadas, pero más por errores en la definición de Cruz Azul que por una ofensiva peligrosa.
Con un empate que no benefició a ninguno, el partido dejó a la afición con un sabor amargo. La serie se definirá en el juego de vuelta, donde ambos equipos tendrán que mostrar mucho más si quieren mantener vivas sus aspiraciones al título.
Para los seguidores que esperaban un clásico lleno de pasión y goles, este encuentro quedará en el olvido como una oportunidad desperdiciada.
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